Los viejos nos han explicado todos que aprendían a tocar en los prados, de pastores y pastoras, que hacían baile en la era, hacían fila de bailadores en la plaza, que echaban cantares trabajando en las tierras… pero ahora aprendemos en aulas, tocamos en salas, teatros y hemos pasado a tocar bajo teito, al cubierto.
Esta transición tiene que ver con la ruptura de la cadena de transmisión oral y con los cambios sociales y culturales vividos durante el siglo XX. Aún así hemos podido conocer decenas de personas que vivieron y nos transmitieron esta cultura tradicional porque no queremos que se pierda subimos a los escenarios para cantar, tocar y contar. Todo aquello que no se vive se olvida y queremos que una generación más conozca estas vidas y protagonistas.
Por eso en este concierto hacemos un recorrido por las músicas del ciclo anual y vital mostrando repertorios, costumbres, instrumentos y poniendo en el punto de mira a los portadores de estos saberes, todos aquellos que nos los contaron.